La Federación de Periodistas de América Latina y el Caribe (FEPALC)ha hecho público un comunicado en el que expresa su “consternación por el asesinato de otro periodista en México. A la fecha, en el 2011, son cinco los trabajadores de los medios asesinados en ese país, sin que el Estado haya sido capaz de hacer justicia en el 98% de los casos”.Esta organización responsabiliza al Estado mexicano por la alta tasa de impunidad, que incentiva no solo los crímenes, sino que alienta una creciente autocensura entre los medios, que han optado por el silencio como mejor herramienta para proteger la vida de los comunicadores.
Pablo Ruelas Barraza, reportero que trabajó para los periódicos locales El Diario del Yaqui y El Regional, fue encontrado sin vida el pasado 13 de junio, en el estado de Sonora. Ruela había recibido amenazas de muerte previas a su asesinato sin que las autoridades iniciaran una investigación al respecto.
Al homicidio de Ruelas Barraza se suma al secuestro del periodista Marco Antonio López Ortiz, jefe de información del periódico Novedades de Acapulco, en el estado de Guerrero. López Ortiz se encuentra en desaparecido desde el pasado7 de junio;día en el que, paradójicamente, se celebraba en México el Día Mundial por la Libertad de Expresión.
La FEPALC, tras demandar una inmediata investigación del crimen de Ruelas Barraza y exigir la aparición inmediata, y con vida, de nuestro colega López Ortiz, expresa su plena solidaridad con su organización afiliada, el Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa de México. En ese sentido, se suma a la exigencia de su secretario general, Isaac Olmedo Lava, quien ha reclamado a las autoridades que asuman su responsabilidad de garantizar la vida, la integridad física y la libertad de los comunicadores en México.
Para la FEPALC y el SNRP la impunidad que ha permitido el gobierno a los enemigos de las libertades de expresión y de prensa, ha favorecido el clima de de violencia que tantas vidas ha cobrado en el país. Por ello, de manera enérgica, demandamos al Estado mexicano que asuma su papel y no permitan que ningún comunicador más sea victimado por ejercer su labor.
