Murió el pasado sábado, 28 de enero de 2017, dejando una dilata trayectoria profesional de 65 años, desde 1939. Ha sido un referente del periodismo almeriense
Periodista apasionado, de los de raza, con una trayectoria profesional de 65 años, de los que 45 trabajó en “La Voz de Almería“, cuya cabecera propuso él para sustituir a la del antiguo “Yugo” en la década de los 60. En este periodo de 1939 a 1984, comenzó de meritorio mientras estudiaba bachillerato en el Colegio “La Salle“, lo que hizo en dos años, para ser redactor desde 1944. Fue también corresponsal en Almería de innumerables medios de comunicación españoles y extranjeros -entre ellos “Ideal” de Granada y Almería, “As“, “Ateneo“, “El Mundo Deportivo“, Agencia Pyresa, “La Vanguardia“, “Gol“, “Hoja del Lunes” de Granada y de Murcia, “Por qué“, “África Deportiva” de Tetuán-; y, redactor – jefe de la “Hoja del Lunes de Almería“, en sus dos épocas. Fue el primer periodista almeriense titulado por la Escuela Oficial de Periodismo (cuarta promoción 1944, con el número de registro 1.700)
Era presidente de Honor de la Asociación de Periodistas – Asociación de la Prensa de Almería (AP-APAL), de la que fue directivo desde 1947 de forma continuada ocupando diversos cargos de responsabilidad. Además, fue director de “Pax“, periódico diocesano de Almería que llegó a los 8.000 ejemplares de tirada.
Estaba en posesión de la Cruz “Pro Ecclesia et Pontifice” concedida por Juan Pablo II, e impuesta por monseñor Justo Mullor, fallecido recientemente, en una ceremonia litúrgica que tuvo lugar en el Convento de las Puras. Fue impulsor y directivo de numerosos colectivos y movimientos ligados a la Iglesia de Almería, entre ellos los Jóvenes de Acción Católica, Adoración Nocturna, Peregrinos de la Iglesia, las hermandades, del Prendimiento, Soledad, y de la Virgen del Mar de las que formaba parte…Fue el primer periodista en tratar la información religiosa, durante más de cuarenta años. Así mismo, fue administrativo de la Escuela de Maestría Industrial, donde fue responsable de su Secretaría durante más de una veintena de años.
Testigo de la historia cotidiana de la Almería de las últimas seis décadas del siglo XX, formó parte de aquella redacción de periodistas capaces de contar las cosas a pesar de la censura, buscando siempre fórmulas para dar a conocer los hechos como eran: Manuel Soriano, Juan Martínez “Martimar“, Caparrós, Diego Domínguez, Manolo Falces, Luis Sánchez Alberti, etc. Y, con los fotoperiodistas históricos Luis Ruiz Marín, Pepe Mullor Escamilla, Diego Guirao, Juan Salmerón,… viajero infatigable por toda la provincia para dar testimonio de la actualidad con compañeros de la talla de Antonio y Mar Cano, Áurea Aurea Martínez Navarro, etc.
Es difícil resumir una trayectoria tan densa y larga, si bien hay que destacar su labor como redactor – jefe de Deportes de “La Voz de Almería“, contando y viviendo el primer ascenso del Almería a Primera División. Fue el primer periodista en Almería que ejerció la especialidad deportiva, formando parte de directivas de la Asociación Española de la Prensa Deportiva. Muy amigo de su colega, el ya también nonagenario José María Lorente Toribio, entrañable compañero y maestro del Periodismo Deportivo en España desde las páginas del diario “Marca“, memoria viva y protagonista del Deporte del siglo XX.
Sus pseudónimos EME – ERRE y EQUIS inmortalizaron columnas de periodismo crítico que diariamente escribía bajo el epígrafe de “Bajo el Manzanillo“, “Almería nuestra“, “Perfil del día” o “Apuntes Deportivos“.
Nos ha dejado una persona buena, un Almeriense con mayúsculas, un periodista de calle, de los que pateaban la ciudad a diario para ofrecer la información cercana. Su dedicación y aportación a la Asociación de la Prensa de Almería (AP-APAL) fueron decisivas para llegar a los tiempos presentes, cuando el censo de periodistas supera los 160 asociados.
