El expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) presentado por “Rías Baixas Comunicación, S.A.”, empresa editora del diario Atlántico, de Vigo, que afecta durante los próximos seis meses a once trabajadores (siete de ellos periodistas) de su plantilla, supone un paso adelante en la devastación del sector periodístico en Galicia, comunidad que ha visto, en los últimos meses, cómo más de quinientos profesionales de la comunicación han pasado a formar parte del colectivo de desempleados.
La plantilla de Atlántico, perteneciente al grupo La Región de Ourense, que apenas hace un año integraban 50 trabajadores, queda ahora reducida a 34, al desparecer la delegación que dicho rotativo había establecido en la comarca de O Morrazo, en las proximidades de Vigo, una zona de especial relevancia económica e informativa para la comunidad gallega.
La situación en la que queda el cuadro de personal del periódico obliga a los redactores del mismo a asumir tareas propias de los fotoperiodistas y a encargarse de los contenidos de la página web, sin que ello conlleve el lógico incremento salarial. Además, los nuevos cometidos les restan tiempo para obtener y redactar noticias, que es la esencia de la profesión periodística.
Ante este nuevo golpe al colectivo laboral de los medios de comunicación, la Asociación de la Prensa de La Coruña (APC) recuerda que éstos deben apostar por la calidad del producto que ofrecen a sus lectores como instrumento para superar la crisis. Y que, al contrario, precarizar las condiciones de trabajo en las redacciones no contribuye, ni mucho menos, a superar una coyuntura tan desfavorable como la que afecta al sector.