La Federación de Periodistas de América Latina y el Caribe (FEPALC) expresa también su profunda preocupación por el secuestro de los periodistas retenidos por grupos armados en el municipio de El Tarra, región Catatumbo, en Colombia, mientras trabajaban

El 23 de mayo, cuatro trabajadores de prensa (tres periodistas y un camarógrafo) de Caracol Televición, RCN Televisión y Radio Catatumbo del Parra fueron retenidos por un grupo guerrillero. Los profesionales estaban buscando información sobre el paradero de Salud Hernández-Mora, corresponsal española del periódico El Mundo en Colombia, quien se encuentra desaparecida desde el sábado 21 de mayo.

William Mora, de Radio Catatumbo del Tarra, Diego Velosa, de Caracol Televisión, y el camarógrafo fueron liberados tres horas después de su secuestro. Los reporteros recibieron golpes y su equipo fue dañado. Diego D’Pablos y Carlos Melos, ambos de RCN Televisión, se encuentran aún retenidos mientras que se desconoce el paradero de la corresponsal española, quien se encontraba en Catatumbo realizando un reportaje.

La Federación Internacional de Periodistas (FIP) se suma a la solidaridad mostrada por sus afiliados españoles, la FAPE y la Federación Española de Sindicatos de Periodistas (FeSP), que han condenado la desaparición de Salud Hernández-Mora y han pedido a las autoridades españolas que colaboren al máximo con las colombianas para  encontrarla.

La región del Catatumbo es, para periodistas de la zona, un lugar de riesgo donde no se puede ejercer libremente la profesión ya que confluyen distintos grupos de la guerrilla (EPL, ELN y FARC), de bandas criminales (Bancrim) y del narcotráfico. En ocasiones anteriores, trabajadores de la prensa han sido retenidos por distintas organizaciones y, según denuncian, las autoridades gubernamentales y fuerzas de seguridad no trabajan sobre las retenciones de periodistas.

La Federación Colombiana de Periodistas (FECOLPER), afiliada de la FIP, exige igualmente la inmediata liberación de los periodistas, rechazando firmemente “esta retención ilegal, haciendo un llamado a quienes tienen en poder a los periodistas desaparecidos las últimas horas, y recuerda que los mismos se encuentran protegidos bajo el derecho internacional humanitario”. A su vez, FECOLPER asegura que “para Colombia, es fundamental conocer las distintas situaciones que en el contexto del conflicto armado se vienen aún presentando en el país”.

Anthony Bellanger, secretario general de la FIP, ha demandado “la inmediata liberación de los tres colegas. No puede haber excusa para la detención de periodistas, para el ataque o para el daño a su equipo. Este es un acto ilegal ante trabajadores que simplemente se encontraban realizando su labor, por lo que deben ser urgentemente liberados. Recordamos a todos aquellos que eligen a periodistas como blanco de agresión que esto es una violación de la normativa internacional y que estos ataques deben terminar urgentemente”.

FEPALC: EL SECUESTRO DE PERIODISTAS CONSTITUYE UNA REGRESIÓN MUY GRAVE 

La Federación de Periodistas de América Latina y el Caribe (FEPALC) ha expresado su profunda preocupación por el secuestro de los periodistas Salud Hernández-Mora, Diego D´Pablos y Carlos Melos.

La FEPALC se siente especialmente consternada por el retorno de una práctica funesta para el quehacer periodístico en Colombia, país que en décadas pasadas secuestraba sistemáticamente a periodistas como siniestra forma de presión.

Lo ocurrido entre el 21 y el 23 de mayo con la corresponsal del diario español El Mundo y los periodistas de RCN Televisión, revelan lo que la FEPALC ha denunciado en múltiples instancias internacionales: Colombia sigue siendo un país con índices alarmantes de violencia contra los periodistas. Las cifras de ataques en los últimos años se han reducido a cambio de altas tasas de autocensura pero no porque existan mejores condiciones de seguridad para los periodistas.

Los casos de Hernández-Mora, D´Pablos y Melos revisten la mayor gravedad puesto que el secuestro en sí mismo es una inminente violación al Derecho Internacional Humanitario. Los periodistas, teniendo en cuenta el rol que cumplen en zonas de conflicto, deben ser civiles protegidos, responsabilidad que debe asumir en pleno el Estado colombiano.

De manera particular, por el momento que vive Colombia, la FEPALC recuerda que el libre ejercicio periodístico y la libertad de expresión son dos garantías ineludibles para consolidar el proceso de paz.

La FEPALC acompaña la demanda de su afiliado, la Federación Colombiana de Periodistas (FECOLPER) que exige la inmediata liberación de los periodistas rechazando firmemente la retención ilegal.

Por ello, se declara en alerta permanente y llama a sus afiliados a permanecer en movilización ante las dependencias diplomáticas de Colombia en América Latina-Caribe hasta que el Estado cumpla con  su deber de localizar a los colegas Salud Hernández-Mora, Diego D´Pablos y Carlos Melos para quienes exige inmediata libertad.